domingo, 23 de diciembre de 2018

Convergencia

Quiero pensar que todo este tiempo he seguido mi camino sin dedicar un solo segundo a desempolvar ni uno de nuestros recuerdos. Quiero engañarme mirando el horizonte y hacer caso omiso a esa falta de oxígeno que me provoca saborear tus besos en la memoria de mis labios. Pero es desafiar a mi corazón e insultar todos los intentos de mi cerebro por apartarte de mi vida. Es un sentimiento estremecedor que no deja impávida ni una minúscula célula de mi ser, electrizante ósmosis entre dos seres empeñados en divergir.
Tantos puntos de convergencia en nuestros caminos no puede ser casualidad, sentir tu energía correr por mis venas, ver el destello en tus ojos y sentir como calan los míos no puede ser error divino. Nos decimos a diario que somos dueños de nuestro destino, aun así es curioso seguir sintiendo esto que me quema cada vez que te siento cerca, desde hace años la misma sensación, las mismas ganas, la misma excitación pero empeñándonos en llevar nuestros pasos al polo opuesto de nuestro núcleo.  
Eres lo más parecido al hombre perfecto, reúnes todo lo que deseo en mi vida, mas sigo sin ti. Entre todas las explicaciones que puedo darme creo que la más acertada es que simplemente nos hemos encontrado en momentos equivocados, porque indudablemente seguimos siendo las personas correctas… 

-Martha Ferrás-