ÉXITO

¿Es vanidad que se muestra a la sociedad o es orgullo personal en el que nos regocijamos en nuestra intimidad?

Para algunos, éxito significa poder, enriquecimiento económico, posesiones y prestigio social.  Nuestro mundo está evolucionando tan de prisa que un día no seremos capaces de reconocernos ante nuestro  propio reflejo. Las preocupaciones por las apariencias y vanidades están contaminando de tal forma a la humanidad que provoca en esta una involución cerebral con alcances inimaginables. 

Para otros, éxito significa enriquecimiento espiritual, estar en paz consigo mismo, tener dignidad invicta, recorrer el camino con optimismo y superar obstáculos. Un día más de vida, brindar más bondad al mundo para enriquecerse personalmente a un nivel espiritual superior. Es despojarse de ataduras, ser transparente, cumplir sueños. Es amar su persona como la magnífica obra que es. Sentirse orgulloso de su esencia con todos sus matices.

He pensado mucho en este tema. Me pregunté lo que yo opino del éxito y lo comparo con lo que opina la mayoría según mi modo de ver… Vi reñido mi análisis con el de una parte importante de la sociedad.

A esa conclusión llegué observando como gestionaban sus prioridades en el día a día. Cómo era posible dedicar tantas horas a la búsqueda del bienestar material descuidando salud, familia y sueños.  

 La suspicacia y querer escribir con propiedad me hizo hacer una pequeña encuesta con hombres y mujeres cercanos sobre que era para ellos el éxito.

Me llamó la atención el gran número de personas que contestó con rotundidad que básicamente para ellos era una cuestión espiritual y no materia, no había vacilación en sus respuestas, pocos dudaron y una minoría ante puso las riquezas materiales.

Este sorprendente resultado originó otra cuestión… Si tan claro tenemos lo que es realmente importante, si sabemos con tanta contundencia que es el éxito ¿Por qué no dejamos de pensar en ello como una teoría y lo aplicamos en nuestro presente, a diario?

Es hora de que la humanidad recapacite y ponga en marcha la maravillosa cualidad de raciocinio con la que fue dotada. Es hora que el concepto de éxito personal se proclame ante que el impuesto por la sociedad.

Porque si cada individuo se aplica lo que considera con certeza ese significado, será feliz por convicción, en un mundo que será mejor por principios éticos.

Para mí… éxito no radica en llegar a la meta sino en transitar el camino. 
Es crecer, brindar, amar… vivir.

Y para usted… ¿Qué es el éxito?

-Martha Ferrás-

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